DESCRIPCIÓN

La cirugía compleja de vía biliar es un procedimiento quirúrgico que se realiza para tratar condiciones o enfermedades que afectan las vías biliares, como cálculos biliares, estenosis, tumores u otras obstrucciones en los conductos biliares.

Esta cirugía puede implicar la reparación, reconstrucción o derivación de las vías biliares para restaurar el flujo normal de la bilis desde el hígado hasta el intestino delgado.

DATOS RÁPIDOS

Duración Variable según la complejidad.

TécnicaCirugía Laparoscopica de Minima imbación.

Valoración Médica Este procedimiento requiere de una valoración médica previa

Hospitalización Varios días a semanas.

REQUERIMIENTOS PREVIOS

• Evaluación médica completa para determinar la indicación y el enfoque apropiado para el caso específico del paciente.
• Estudios de imagen como resonancia magnética, tomografía computarizada o colangiografía para evaluar la anatomía de las vías biliares y identificar las obstrucciones.
• Discusión con el equipo médico sobre los riesgos, beneficios y opciones de tratamiento disponibles.

CANDIDATOS AL PROCEDIMIENTO

• Pacientes con enfermedades o condiciones que afectan las vías biliares, como cálculos biliares complicados, tumores, estenosis o otras obstrucciones.
• Pacientes que no responden a tratamientos médicos o procedimientos menos invasivos.
• Pacientes que son considerados adecuados para la cirugía compleja de vía biliar por su estado de salud general y las características de su condición.

RIESGO

• Complicaciones quirúrgicas como infecciones, sangrado, daño en estructuras cercanas, entre otros.
• Riesgos relacionados con la anestesia, como reacciones alérgicas o problemas respiratorios.
• Riesgos asociados con la manipulación de las vías biliares, como fugas de bilis, estenosis recurrente o complicaciones pancreáticas.

VENTAJAS

• Resolución de la enfermedad o condición que afecta las vías biliares, lo que puede aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida del paciente.
• Posibilidad de utilizar técnicas mínimamente invasivas que pueden implicar una recuperación más rápida, menos dolor postoperatorio y menor riesgo de complicaciones en comparación con la cirugía abierta.